Al poeta

AL POETA

autor anonimo





En un viejo jardín boscoso,

Enmarañado y tranquilo;

Cada tarde busca asilo,

Un poeta silencioso.



Contempla inmóvil el infinito,

Con mirada honda y serena;

Como narrando una escena,

De un poema aun no escrito.



Una mano bajo el mentón,

Apoya su rostro triste;

Es la vida que lo embiste,

Con furia y sin compasión.



En la otra un bastón de pino,

Su inseparable compañero;

Tallado en duro madero,

Su fiel amigo en el camino.



Viste un traje de oscuro cielo,

Y un sombrero de claro color;

En su pecho tal vez va una flor,

Marchita de amor y desvelo.



Murmura bajito unos versos,

Quizás de un poema postrero;

Muy cerca le oye un jilguero,

Las azaleas y los mastuerzos.



Presiente que la dulce muerte,

Lo espera tras de una esquina;

Bajo una frondosa encina,

O junto a un pedregal inerte.



Sería en otoño de vientos,

Un jueves con lluvia tupida;

El día que deje la vida,

El final de sus sufrimientos.



En silencio el bardo se aleja,

Y su sombra se agiganta;

Mientras un jilguero canta,

Sus versos de amor y queja.



Pasó a toda prisa el verano,

Y él  en su poema inmerso;

Solo  en su propio universo,

Sumido en su mundo lejano.



Hoy el poeta no ha venido,

Vacía le extraña una banca;

Sobre ella hay una rosa blanca,

Que se ha caído de un nido.



Calló su canto hoy el jilguero,

Ya es otoño y el viento sopla,

Se lleva el verso y la copla,

Es un jueves triste de aguacero.